Hábitat del Tigrillo
Esta especie se encuentra en una amplia gama de hábitats, desde las tierras bajas semiáridas de Caatinga hasta los bosques nublados de los Andes. En Costa Rica, la especie está confinada casi por completo a bosques montanos a lo largo de los flancos de volcanes y otras montañas altas desde 1,000 m hasta la lÃnea de árboles (páramo) y ocupan bosques nubosos y bosques de elfos de alta elevación (J. Schipper com. Pers.). Su patrón de distribución en Costa Rica y Panamá se parece mucho al del roble ( Quercussp.) bosques dominados (J. Schipper com. pers.). Mientras que en América Central y partes del norte de América del Sur puede ser más común en el bosque nublado montano, se encuentra principalmente en las tierras bajas de Brasil, y se informa desde los bosques lluviosos hasta los bosques caducifolios secos, sabanas, matorrales espinosos semiáridos, tanto en prÃstina y zonas perturbadas. Sin embargo, la especie parece estar ausente en los llanos pero presente en algunos registros de sabanas de Rupununi en Guyana (Payán pers. Obs.). En hábitats perturbados, puede ocurrir incluso cerca de asentamientos humanos, siempre y cuando haya cobertura natural y base de presas (Oliveira et al.2008). Sin embargo, Marinho (2015) ha demostrado que la presencia de la especie se ve favorecida por una cubierta leñosa más densa y la distancia de los asentamientos rurales en la Caatinga seca del noreste de Brasil. Aunque se puede encontrar en algunas áreas localizadas de la cuenca del Amazonas (Oliveira 2004), el uso de los bosques amazónicos de tierras bajas es prácticamente desconocido y requiere atención de investigación. Después de un enorme esfuerzo de 56.837 dÃas de captura con cámara, en 12 sitios de estudio diferentes en toda la Cuenca, no se obtuvo ningún registro de la especie (Oliveira et al. Datos no publicados).
El gato tigre del norte es un felino solitario de tamaño pequeño (2,4 kg) poco conocido, con un tamaño medio de camada de 1.12 gatitos (1-4) (Oliveira y Cassaro 2005). El patrón de actividad de Diel es principalmente nocturno-crepuscular, pero con una cantidad considerable de actividad durante el dÃa. Sin embargo, también podrÃa ser altamente diurno en algunas áreas de Brasil. La dieta de Leopardus tigrinus todavÃa está muy poco estudiada, pero se sabe que se basa en pequeños mamÃferos (<100 g; Trigo et al. 2013b), aves y reptiles (especialmente lagartos). Los datos limitados sobre el rango de hogar muestran que son mucho más grandes de lo que cabrÃa esperar por su pequeño tamaño corporal. Su rango es de 1 a 17 km² (Oliveira et al.2010). Los gatos tigres del norte son tÃpicamente raros a poco comunes, y ocurren en bajas densidades de población en la mayor parte de su rango, especialmente en lo que se esperarÃa de un felino de su tamaño. Las densidades son tÃpicamente de 1-5 / 100 km², pero pueden alcanzar 15-25 / 100 km² en algunas áreas localizadas donde los ocelotes son raros o ausentes (Oliveira 2011, Oliveira et al. 2010). Sus números / densidades se ven fuertemente afectados negativamente por el Ocelote más grande, su posible depredador / competidor intraguild (Oliveira et al. 2008, 2010; Oliveira 2011).
¿Qué población existe del Leopardus tigrinus?
La abundancia relativa y las densidades de población estimadas varÃan mucho, y el Leopardus tigrinus del norte es menos abundante que el Leopardus guttulus del sur y también la especie tropical más rara del gato neotropical (Oliveira 2011). Leopardus tigrinus es raro en todas partes, incluidos sus hábitats reportados hasta la fecha: bosques andinos montanos y nubosos, bosques centroamericanos, bosques amazónicos, sabanas Rupununi y dominios brasileños Cerrado y Caatinga (Moreno et al.2011 , Oliveira 2011, Payán y González-Maya 2011, Oliveira et al.2013). En el Amazonas, la densidad es muy baja, esperada en aproximadamente 0.01 / 100 km². Los estudios con cámaras trampa en otras partes de su área de distribución indican que la especie generalmente ocurre en densidades entre 1-5 / 100 km² o menos (Oliveira et al.2010, 2013). En América Central, la especie rara vez aparece en las trampas de la cámara, incluso donde se sabe que ocurren, lo que sugiere que evitan las trampas o son naturalmente raras y escurridizas en esa área (Schipper com. Pers.). Una tendencia similar también se encuentra en varias áreas de Brasil, donde los autores la encontraron en la mayorÃa de las áreas en números intrÃnsecamente bajos, y aparentemente esos números no se deben a la timidez de las cámaras trampa (Oliveira, comunicación personal). La especie estuvo ausente de todos los estudios extensivos de cámaras trampa en los llanos de Colombia y en toda la AmazonÃa, lo que representa su extrema rareza allà (Oliveira, comunicación personal de Payán). El gato tigre del norte se ve afectado negativamente por los números de ocelote y no parece alcanzar un tamaño de población efectivo para la persistencia a largo plazo en ninguna unidad de conservación posiblemente debido al «efecto ocelote» (Oliveiraet al. 2010, Oliveira 2011). Parece que donde los ocelotes son raros o ausentes, la densidad de población promedio de los gatos tigre varÃa de 5-20 ind./100 km², pero se espera que sea mucho más baja que 5/100 km² donde hay ocelotes presentes (estimaciones de alta densidad, ca. 20 / 100 km², se obtienen solo en muy pocas áreas aisladas (Oliveira et al. 2010, Oliveira 2011). Leopardus tigrinus está clasificado como Vulnerable en Colombia (MAVDT 2005, Rodriguez-Mahecha et al. 2006) y en Peligro en Brasil (IBAMA / MMA 2014). El área estimada de ocupación de especies (AOO) para la subespecie L. t. tigrinus y L. t. pardinoides se estimó de 893,200 a 1,020,800 km² del hábitat disponible total actual (Oliveiraet al. presentado, Payán y González-Maya 2011). Esto incluye aplicar una reducción del 20-30% para compensar la inclusión de pequeños fragmentos (que fueron considerables en muchas áreas) (IBAMA / MMA 2011 a, b). La estimación de población extrapolada basada en las estimaciones de distribución anteriores y también en las densidades estimadas (0.01 / km²), da como resultado un tamaño de población total esperado que varÃa de 8,932 a 10,208 individuos adultos. La disminución basada en las tasas de deforestación del hábitat de la especie es ciertamente superior al 10% en las próximas décadas (Morton et al. 2006, Mulligan 2010, Garavito et al.2012). Parece que las sabanas del Parque Estatal Mirador y el complejo de áreas protegidas alrededor del Parque Nacional Nascentes do Rio ParnaÃba en el medio norte brasileño y las áreas protegidas andinas en Colombia son las áreas más importantes para la conservación de las especies (Oliveira et al. 2008 , 2014; Payán y González-Maya 2011).
Localización geográfica del Trigrillo
El rango de distribución del gato tigre del norte se expande desde Costa Rica y Panamá en América Central a América del Sur hasta el centro de Brasil. Sus lÃmites meridionales aún no se conocen bien, asà como el alcance de una posible superposición con las poblaciones del gato tigre del sur ( L. guttulus ) (T. Oliveira com. Pers.). Además, también existe evidencia considerable de que la población centroamericana, sugerida como L. t. oncilla también representa una especie diferente (Johnson et al. 1999, Trigo et al. 2008). Además, también es posible que la población del norte de América del Sur, descrita como L. t. pardinoides, también comprenderá una especie separada (Nascimento 2010), o estará junto conL. t. tigrillo . del noroeste de América del Sur, una especie claramente distintiva de L. t. tigrinus (T. Oliveira com. pers.). Existen registros de la cuenca del Amazonas, pero la distribución podrÃa ser discontinua y desigual, y la especie extremadamente rara (Oliveira 2004). L. tigrinus ha sido descrita como una de las especies más raras de la AmazonÃa, y está ausente en los 12 estudios extensivos de cámaras trampa evaluados en toda la cuenca. Su aparición allà puede ser marginal y restringida a algunos enclaves (Oliveira, datos no publicados). La especie está ausente de los Llanos (Payan et al.2007) y de la penÃnsula de Darién que conecta América Central y del Sur. De Ecuador y Perú solo existen pocos especÃmenes de museo y solo en 2000 la especie se confirmó formalmente en Bolivia a través de la captura de animales vivos. Aunque el gato tigre del norte se ha recolectado a una altura de hasta 4.800 m (Cuervo et al. 1986), este es probablemente un caso atÃpico, ya que hay muy pocos registros a 3.000 m o un poco más (comunicación personal de T. Oliveira). Sin embargo, en Costa Rica, en el Parque Nacional Chirripó, la especie se registró a 3.625 m (González-Maya y Schipper 2008). En Colombia parece estar restringido a elevaciones superiores a los 1.500 m, sin embargo, en Brasil, la mayorÃa de los registros estaban por debajo de los 500 m (Oliveira et al . 2008). Parece que la mayor parte de la distribución de las especies serÃan los bosques nublados de Costa Rica paraL. t. oncilla , a 1,500-3,000 m en el norte de los Andes para L. t. pardinoides , y las tierras secas de los dominios Cerrado y Caatinga y el bosque caducifolio adyacente en el centro-norte de Brasil para L. t. tigrinus . Todas las demás áreas parecen ser marginales para la especie (Oliveira, datos no preparados / en preparación). Aunque el alcance de la ocurrencia es bastante amplio, el área real de ocupación (AOO) está considerablemente restringida, especialmente porque grandes porciones de los altos Andes, o del Cerrado brasileño (ca. 50%) y Caatinga (ca. 46%) tienen ya ha sido suprimida y convertida en agricultura-pastoreo, donde se sabe que la especie está ausente (Klink y Machado 2005; Oliveira et al.2008; IBAMA / MMA 2011a, b; Payán y González-Maya 2011; CI 2012). Por lo tanto, con base en y utilizando las estimaciones de cobertura disponibles restantes como el AOO esperado (y compensando la inclusión de áreas inadecuadas y los pequeños fragmentos), deberÃa estar en algún lugar alrededor de 893,200-1,020,800 km 2 , y está disminuyendo continuamente (Morton et al. 2006, Mulligan 2010). Además, si el gato tigre del norte tiende a evitar las formaciones más abiertas y la proximidad a los asentamientos rurales, como informó Marinho (2015) para Caatinga y Oliveira et al . (2014) notaron para el Cerrado, entonces el AOO «de facto» deberÃa ser aún más pequeño.
¿Por qué el Leopardus tigrinus está amenazado de extinción?
Leopardus tigrinus se ha dividido recientemente en dos especies: L. tigrinus y L. guttulus (Trigo et al. 2013a). El concepto actual se aplica solo a los primeros, distribuidos desde el noreste de Brasil a través de la mayorÃa del norte de América del Sur hasta lo que parecen poblaciones separadas en Panamá y la Cordillera Central de Costa Rica (Hunter y Barrett 2011, Trigo et al. 2013a). L. tigrinus y L. guttulus no muestran evidencia de flujo continuo de genes, mientras que L. tigrinus y Pampas cat ( L. colocolo ) no han desarrollado barreras reproductivas intrÃnsecas completas, lo que les ha permitido hibridarse (Trigo et al.2013a). Además, también existe evidencia considerable de que la población centroamericana, sugerida como L. t. oncilla también representa una especie diferente (Johnson et al. 1999, Trigo et al. 2008). Leopardus tigrinus está muy extendido y es raro en todas partes, incluidos sus hábitats reportados hasta la fecha: bosques andinos de montaña y neblina, bosques centroamericanos, bosques amazónicos, sabanas Rupununi y dominios brasileños Cerrado y Caatinga (Moreno et al.2011 , Oliveira 2011, Payán y González -Maya 2011, Oliveira et al.2013 ). En el Cerrado y Caatinga brasileños, las densidades también son muy bajas, tÃpicamente alrededor de 0.01-0.05 / km 2 (Oliveira et al.2010, 2013). En la AmazonÃa, la presencia de la especie puede ser marginal y restringida a algunos pequeños enclaves aislados. El gato tigre del norte estuvo ausente de todos los extensos estudios de cámaras trampa que totalizaron 56,837 dÃas trampa en toda la cuenca del Amazonas y fue considerado el carnÃvoro más raro allà (Oliveira et al ., Datos no publicados). Las estimaciones de abundancia de este pequeño felino son más bajas que las reportadas para el jaguar, el puma y el ocelote mucho más grandes, y hay evidencia que sugiere fluctuaciones de la población o disminuciones de razones desconocidas, en algunas áreas, estimadas en 10-40% (Oliveira 2011, UNP datos). Se ha sugerido que un alto número de poblaciones de ocelotes afecta negativamente a la población de gatos tigres del norte (Oliveira et al. 2010, Oliveira 2011). Probablemente la mayorÃa de la población deL. tigrinus se encuentra fuera de las áreas protegidas y fuera del bosque lluvioso de tierras bajas de la cuenca del Amazonas (Oliveira 2011), en hábitats que están experimentando tasas variables de pérdida debido a la conversión del hábitat a la agricultura. Ejemplos extremos incluyen el Cerrado y Caatinga brasileño (con pérdidas del 50% o más dependiendo de la fuente; Klink y Machado 2005, IBAMA / MMA 2011a, CI 2012) y la AmazonÃa brasileña (con deforestación de más del 20% / 10,000km 2 / año en los últimos años; Morton et al. 2006) y una pérdida general del 90% del bosque nublado en el norte de los Andes (Bubb et al. 2004, Garavito et al.2012). La pérdida de hábitats por la conversión a tierras agrÃcolas es sin duda su principal amenaza para la supervivencia también en Panamá, Venezuela, Colombia, Brasil y la frontera de deforestación de la cuenca del Amazonas. Otras amenazas incluyen la caza de represalias por la depredación de aves de corral y el comercio de piel y mascotas, la competencia y la propagación de enfermedades por perros domésticos y las matanzas en la carretera (Oliveira et al. 2013, Marinho 2015). También hay hibridación con Pampas Cat en el centro / noreste de Brasil, que puede ser un proceso natural o antropogénico cuyo alcance como amenaza es desconocido (Trigo et al . 2013a). Si se confirman nuevas divisiones de especies taxonómicas, las subpoblaciones serán aún más pequeñas. Altas tasas de pérdida de hábitat, fragmentación y aislamiento en Brasil (Klink y Machado 2005, Mortonet al. 2006) representan la supresión del hábitat, no el hábitat degradado, que deberÃa reflejar la disminución de la población de especies equivalentes, por ejemplo. El área estimada de ocupación de especies (AOO) para la subespecie L. t. tigrinus y L. t. pardinoides se estimó de 893.200 a 1.020.800 km 2del hábitat disponible total actual (Payán y González-Maya 2011). Esto incluye aplicar una reducción del 20-30% para compensar la inclusión de pequeños fragmentos (que fueron considerables en muchas áreas; IBAMA / MMA 2011 a, b). Una población en el área de mosaico semiárido de matorral de Caatinga / bosque seco en el estado de BahÃa, Brasil, mostró una reducción observada de la abundancia del 25.9% de 2012 a 2015 (LP de Castro Meira, TG de Oliveira, comunicación personal). El declive del gato tigre del norte durante tres generaciones se modeló con un algoritmo de entropÃa máxima para 52 Leopardus tigrinusregistros en Colombia y 19 variables bioclimáticas y encontraron una pérdida de población del 12,7% durante tres generaciones para la especie (es decir, 15 años). La disminución para Brasil, que posee la mayorÃa del rango de especies, se estimó en 36.8% en tres generaciones (Oliveira et al. 2013, MMA / IBAMA 2014). Incluyendo una población estable para Centroamérica, la reducción general se estima en 31.7%. Por lo tanto, la especie se clasifica como Vulnerable VU A2c. Se estima que el tamaño total de la población en todo el rango es inferior a 10-11,000 individuos, la especie continuará disminuyendo y faltan acciones de conservación destinadas a la especie.
Los Tiger Cats fueron explotados en gran medida para el comercio de pieles hace décadas, luego del declive del comercio de Ocelotes (Payan y Trujillo 2006). Aunque el comercio internacional cesó, todavÃa hay una caza ilegal localizada, generalmente para el mercado interno. Las amenazas actuales para esta especie incluyen pérdida de hábitat, fragmentación, enfermedad, matanza en carreteras, comercio ilegal (mascotas y pieles), represalias por depredación de aves de corral (Oliveira et al. 2008, 2013; Payán y González-Maya 2011; DÃaz- Pulido y col.2013; Marinho 2015). En general, la mayor amenaza es la tasa desenfrenada de pérdida de hábitat, fragmentación y aislamiento. En los Andes, la deforestación de los bosques nubosos se debe principalmente a la conversión a la agricultura, pero también incluye petróleo, represas hidroeléctricas, expansión urbana y construcción de carreteras (Payán y Gonzalez-Maya 2011, CI 2012). En el Cerrado y Caatinga brasileños, la represión a la agricultura es, con mucho, la principal amenaza. En estos dominios, la tasa es en realidad más alta en el área llamada MATOPIBA (los estados de Maranhão, Tocantins, Piauà y BahÃa), donde es el doble que en las otras partes del paÃs y que también comprende el área principal y más importante para la especie (IBAMA / MMA 2011a, b; Oliveira 2011). Por lo tanto, las poblaciones en el área de distribución central de Leopardus tigrinusel alcance se reduce y fragmenta cada vez más. El cambio en la dinámica de las especies nativas (depredador / competidor) podrÃa representar otra amenaza potencial previamente no detectada (Oliveira 2011, Oliveira et al . 2013). La hibridación con el gato pampeano en todo el noreste y centro de Brasil (el área de distribución principal para L. t. Tigrinus ) se detectó en el 100% de todas las muestras evaluadas. Este puede ser un proceso natural o antropogénico y se desconoce su alcance como amenaza (Trigo et al. 2013a), pero probablemente ya comprometerÃa alrededor del 70-80% de la población total de especies, o incluso más. Este alto nivel de hibridación es inaudito para cualquier especie de gato existente.
Medidas de conservación del Tigrillo
Incluido en el Apéndice I. CITES. La caza de la especie está prohibida en Brasil, Colombia, Costa Rica, Guayana Francesa, Surinam y Venezuela (Nowell y Jackson 1996). En el Amazonas, los registros de campo sugieren que, donde se encuentran, las poblaciones son extremadamente bajas, por lo tanto, no se debe percibir que estas áreas son salvaguardas para la especie como lo es para otros felinos (Oliveira 2004). Es probable que la especie presente solo una distribución marginal allà (Oliveira, datos no publicados). Se espera que las poblaciones en las áreas protegidas sean muy bajas, probablemente debido al impacto de mayores densidades de Ocelote (L. pardalis ), de modo que la conservación de las poblaciones del Gato Tigre del Norte deberÃa depender principalmente de tierras privadas (Oliveira et al.2010, Oliveira 2011). Se ha estimado que posiblemente solo un complejo de áreas protegidas podrÃa mantener aisladamente una población mÃnima viable de esta especie (Oliveira et al. 2008, Payán y Gonzalez-Maya 2011). Se requieren más estudios sobre la ecologÃa, la demografÃa, la historia natural y las amenazas de la especie. Esta especie necesita ser evaluada a nivel de subespecie debido a la diversidad genética dentro de la especie. Una reevaluación de la taxonomÃa de esta especie es una prioridad de investigación urgente ya que la porción norte de la población podrÃa ser una especie distinta (Taller de la Lista Roja de Gatos de la UICN 2007).